Y de repente...



Hoy saqué eso que tenía que sacar, y moviéndolo hacia fuera me di con la sorpresa de que tenía agujeros por todos lados, como si las polillas no hubieran tenido respeto por sus años regados. Como si ya por los años se hubiera desecho, tan lastimosamente.

Y sin embargo…

Hoy te saqué para que jugaras

Hoy te saqué porque había escampado

Hoy te saque, y al sacarte me di cuenta que por hacerlo, por olvidarte, ya te habías muerto

Con la gloria que siempre buscabas con tus silencios

Con la pena que no te gustaba

Hoy te saqué y volaste

Como siempre vuelas cuando trato de convertirte en palabras